Con el objetivo de garantizar la integridad de la población y disminuir el impacto de las lluvias, el Gobierno Municipal de Jiutepec, encabezado por el alcalde Eder Rodríguez Casillas, ha intensificado los trabajos preventivos a través de brigadas, tras identificar 27 zonas prioritarias con riesgo de inundación y desbordamiento.
José Iván Fernández Galván Secretario de Desarrollo Sustentable y Servicios Públicos de Jiutepec, indicó que en el municipio atraviesan dos barrancas importantes, la microcuenca “Gachupina” y la barranca “Analco”, que históricamente han sido zonas de preocupación para las autoridades debido a su presencia pronunciada.
Explicó que la “Gachupina” tiene una extensión de 15 kilómetros y atraviesa 13 colonias, mientras que la barranca “Analco” tiene una longitud de 16 kilómetros y tiene presencia en 14 colonias de Jiutepec.
En funcionario agregó que para abordar estos desafíos, “el Ayuntamiento de Jiutepec está realizando trabajos de desazolve y limpieza constante en barrancas, cauces y alcantarillas pluviales, así como la supervisión y limpieza de apantles y zonas agrícolas. Además está trabajando en la creación de una base de datos sobre los recursos humanos y materiales necesarios para atender las emergencias”, dijo.
Fernandez Galván, informó que se han identificado 27 puntos de riesgo críticos en las barrancas La Gachupina y Analco, por lo que la estrategia para hacer frente al temporal de lluvias incluye la remoción de basura, escombros y vegetación que puedan obstruir el flujo del agua, así como la revisión de taludes para prevenir derrumbes.
Además, agregó, “existe una coordinación con comuneros y ejidatarios del municipio para la limpieza de apantles y arroyos, y se ha realizado el desalojo de indigentes en las barrancas con el respaldo de la Secretaría de Seguridad Pública. También se ha vacunado contra el tétanos a los trabajadores que realizan tareas de desazolve y limpieza”.
Finalmente, enfatizó que el objetivo es prevenir contingencias y proteger a la población de Jiutepec durante la temporada de lluvias, asegurando que todas las áreas vulnerables estén preparadas para enfrentar el temporal, así como proteger el patrimonio de los productores y la infraestructura agrícola del municipio.

